En el presente trabajo buscaremos revisar y exponer desde una perspectiva filosófica los principales fundamentos y argumentos sobre la libertad, el libre albedrío y el determinismo en la Antigüedad Tardía. Fecundo periodo filosófico donde muchos de estos principios encontraron su germen en las más diversas escuelas, sirviendo de base y fundamento para con la tradición filosófica y su posterior desarrollo. Y es que en efecto, la cuestión del hombre, su libertad y el fatalismo del mundo que lo rodea no han dejado de ser un asunto que aún a día de hoy nos atañe de manera directa y se nos presenta como fundamental.
Es por ello, a fin de conocer las primeras causas de dichas cuestiones, que nos proponemos abarcar un amplio campo de estudios. Arrancando desde Alejandro de Afrodisia y su férrea defensa del libre albedrío frente a todas aquellas escuelas que defendían algún tipo de determinismo, entre las que destacarían el fatalismo trascendente, el determinismo megárico o sobre todo: el estoicismo. Sobre el cual haremos un especial hincapié, destacando a algunos de sus principales exponentes teóricos –así como sus posibles contrarréplicas al Afrodisio– como pudieran ser Crisipo o Epicteto.
Tras esto, analizaremos su posterior asimilación en muchos de los principales presupuestos que comenzaron a desarrollarse tanto en el cristianismo, de la mano de autores como Bardesane u Orígenes –sobre el que nos centraremos en el concepto de movimiento por sí–; como en el neoplatonismo, última gran escuela filosófica de la Antigüedad. Centrándonos en Plotino y su concepción de la voluntad – Enéada VI 8–, la fatalidad o la providencia –Enéada III–, desembocando finalmente en aquella hermosa visión que nos legó en su Enéada I 6 sobre la belleza. En la cual define al mismo hombre como el escultor de su propia vida, insuflando dentro de la propia concepción de la persona el más hermoso contenido estético.
Del mismo modo y en contraposición a muchas de las tesis que expondremos, analizaremos el desarrollo de otras escuelas que tuvieron un desarrollo igual de irresistible en su tiempo, y que sin embargo, llegaron a defender posturas frontalmente opuestas a la de estos autores, como pudieran ser el gnosticismo o todos aquellos defensores de un tipo de determinismo astral –el cual ciertamente no ha dejado de estar de moda–.
Es por tanto el objetivo de esta investigación presentar de manera fiel y detallada la viva lucha de un mundo que, entre el cambio y la tradición, proyectaba conceptos e ideas nuevas frente a toda una serie de desafíos y retos que el mundo, en continuo y vertiginoso cambio, obligaba a asumir. Los cuales dieron como resultado una viva, rica y variada tradición filosófica que terminó por dar forma y sentido a la propia concepción de la persona y su lugar en el mundo.
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Agustín Moreno Fernández
Comentó el 10/12/2020 a las 13:40:23
Muchas gracias Ramón por sus atentas respuestas a las cuestiones plantedas. Respuestas profusas, desarrolladas y ricas en referencias que me ayudan a comprender mejor algunos aspectos de su ponencia, ya de por sí muy completa. También me llamaron la atención las analogía con la actualidad. Por ejemplo en cuanto al gnoscitismo, pensaba en la "New Age", su sincretismo y también su sintonía con elementos gnósticos... Gracias de nuevo. Un saludo, Agustín.
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Gabriel Terol Rojo
Comentó el 10/12/2020 a las 13:22:28
Gracias, Gonzalo, por tu presentación.
Mi pregunta más que una cuestión sería en este caso una petición a que pudieras ampliar brevemente la repercusión y contrariedad del binonimo determinismo&libertad en el gnosticismo.
Gracias
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Ramón Torres Villegas
Comentó el 11/12/2020 a las 14:00:34
Muy buenas Gabriel, con mucho gusto.
Las principales críticas hacia el gnosticismo por parte de los primeros autores cristianos -Ireneo, Clemente u Orígenes entre otros- irían dirigidas frente a su consideración de las diferentes naturalezas ¿Qué significa esto?, para el gnosticismo -dentro de su complejo sistema mitológico- existirían tres tipos de hombres, distinguiendo entre pneumáticos -los elegidos que alcanzaban la salvación-, psicológicos -dotados de libre albedrío, podían salvarse por el merito y el cumplimiento de la ley, en resumen, los miembros de la Iglesia , los cuales eran considerados de manera claramente inferior- y los somáticos -pasionales, primitivos, inferiores en virtud y rango-.
Orígenes criticará esto, alegando que será razón necesaria el uso del libre albedrío para alcanzar la virtud y el mérito, en clara consonancia con Alejandro de Afrodisia -aunque no por ello cayendo en el pelagianismo de negar la necesidad de la gracia- Rechazando así ese ``predestinacionismo´´ del gnosticismo. Esta acérrima defensa de l libre albedrío se verá a lo largo de toda su obra, desde su famoso método alegórico a fin de interpretar los diferentes pasajes que eran interpretados por los propios gnósticos en clave determinista, defendiendo esas diferentes sustancialización -buena y mala- de las naturalezas -como por ejemplo el famoso Ex 14,4: ``Yo endureceré el corazón del faraón´´-. Hasta su propia idea de la existencia de los diferentes racionales que en base a la gravedad de su caída -en la preexistencia de las inteligencias- cayeron deviniendo en demonios o humanos. Y que en base a su merito de acción podrán ir retornando al Padre -apocatástasis-. El libre albedrío en Orígenes, es una facultad que esta profundamente ligada a la propia naturaleza y existencia de la persona.
Precisamente, el propio ``Discurso sobre el libre albedrío´´ que Erasmo de Rotterdam lanzará frente a Lutero -autor del famoso ``De servo arbitrio´´- Tendrá una clara influencia del propio Orígenes, el cual era bastante conocido y admirado por el propio Erasmo.
De todas formas y como expongo, hay quien ve dicha definición determinista del gnosticismo como un tanto simple. Siendo que realmente sería un fenómeno realmente rico que necesitaría de mucho más estudio, que por supuesto yo, a día de hoy, no poseo.
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Agustín Moreno Fernández
Comentó el 07/12/2020 a las 22:37:18
En primer lugar, felicidades por el trabajo realizado. Me gustaría preguntar, al respecto del libre albedrío, por ejemplo en el contexto de Alejandro de Afrodisia, pero no sólo, ¿se presupone que solamente quienes no son esclavos o tienen derecho de ciudadanía son libres para "optar por algo o su contrario" en muchos sentidos? ¿Qué concepción del sujeto del libre albedrío se presupone? ¿Estarían excluidas las mujeres? ¿Qué vínculos o implicaciones sociopolíticas tendría el libre albedrío? Por otra parte, en relación al gnoscitismo, y al proselitismo paradójico de sus partidarios en busca de adeptos, criticando el determinismo astral, aunque sea para derivar en otro determinismo de predestinación en la salvación, ¿qué criterios habría para aceptar a nuevos miembros, para validar su actitud o aptitud? ¿no es entonces el conocimiento la fuente de salvación sino el conocimiento de que ya está decidida su salvación? Muchas gracias.
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Ramón Torres Villegas
Comentó el 09/12/2020 a las 23:54:10
Muy buenas Agustín.
Me alegra ver que efectivamente mi ponencia haya podido despertar tanta curiosidad. Las preguntas que me haces desde luego son variadas y certeras, empecemos.
-Con respecto a la primera pregunta, el libre albedrío como facultad en hombres libres, mujeres y esclavos. Decir que sería difícil de precisar, a fin y al cabo si bien Alejandro de Afrodisia parte por completo de los postulados de Aristóteles, siendo uno de sus grandes comentadores. Y bien es sabida la opinión de Aristóteles acerca de estas cuestiones -véase el apartado que le dedica a la esclavitud en el libro I de la Política o Metafísica 1075a 19- El contexto y tiempo en el que el ``Afrodisio´´ desarrolla su actividad sería ciertamente distinto, al igual que el fenómeno de la esclavitud y el papel de la mujer en la misma. No me atrevería a extrapolar de una manera firme las categorías que Alejandro establece en torno al libre albedrío desde un plano antropológico y metafísico a un plano jurídico-político. De todas formas, si tuviera que decantarme, diría que en efectos, los esclavos también poseían dicha capacidad de libre albedrío -en lo que a su plano ontológico se refiere, no político-.
-Con respecto al asunto de las implicaciones socio-políticas decir que su pregunta es ciertamente interesante. Ya que, algunos, como el especialista P. Thillet, quien ha visto en esta obra, -la cual estaba dedicada a los emperadores Septimio Severo y Caracalla- un intento de legitimar y reforzar el poder imperial. Thillet acude a la obra: ``Vida de Apolonio´´ de Tiana de Filóstrato, donde se narraría una conversación entre el emperador Vespasiano en Egipto con dos filósofos: Dión y Éufrates, en presencia de Apolonio. Donde todos ellos charlaban a propósito de cual podía ser la mejor manera de gobernar el imperio, siendo que Éufrates -estoico- le respondía que lo mejor que podía hacer era renunciar al gobierno de uno sólo y devolver el poder al pueblo, en consonancia con el ideal de igualdad más ``democrática´´ existente en el estoicismo. En efecto, para Thillet, Alejandro lo que estaría haciendo sería denunciar las nociones consecuencias que las teorías estoicas del destino podían tener para con la ley y autoridad imperial y el culto religioso -entre otros-. Pero como digo es una teoría, no se hasta que punto tendría preponderancia en la interpretación de estos textos.
-Con respecto a las categorías ontológicas del hombre decir que estas se encuentran mejor recogidas y detalladas en el De Anima de Alejandro. En dicha obra , y haciendo alusión curiosamente a cierta terminología estoica -con respecto al impulso-, Alejandro sitúa el libre albedrío como una facultad propia del alma. La cual divide en vegetativa, sensitiva por medio de la cual recibimos impulsos y representaciones y la facultad racional, a la que le corresponderían la capacidad de deliberativa y científica. Donde reside realmente dicho libre albedrío, al ser posible el discernir y juzgar dichas representaciones e impulsos que nos acaecen.
-Con respecto al gnosticismo y las actitudes y aptitudes necesarias para ingresar. Bien, en primer lugar, en requerimiento de los requisitos: el Bautismo. El gnosticismo es una corriente que nace de manera simbiótica al propio cristianismo -es más en un primer momento, y sin que se me malinterprete, ellos mismos son cristianos-, los cristianos ``ortodoxos´´ -por llamarlo de algún modo- y los gnósticos -no hay un sólo gnosticismo sino que hay varios, pero en mi ponencia me refiero a la corriente de Valentín- convivían y hacían lectura de los mismos textos. Fue sólo paulatinamente como se fueron separando y cuajando cada uno su propia cosmovisión y ethos. Los ``gnósticos´´ por tanto hacían uso y requerimiento de esos mismos sacramentos -incluso tengo entendido que a veces de hasta un mayor número-. Intuyo que no se requería de un nivel ético o intelectual excesivamente elevado sino que por hecho de ser ``espiritual´´, elegido, ya valía. Posible prueba de ello sería la alusión que el propio Plotino lanza contra estos en su Enéada II,9 al referirse a muchos de ellos que no profesan ningún tipo de ética o virtud ejemplar pero se auto reconocían como claros exponentes de santidad. Claro está que, dentro del propio gnosticismo, una vez aceptado, se trataba de perfeccionar y ascender de manera ascética. Es un fenómeno realmente complejo y más dinámico de lo que puede parecer. Y que por supuesto, yo aún no conozco en profundidad.
-Con respecto al tema del conocimiento y la salvación, decir que no. Dicho proselitismo no se materializaba en la simple difusión -o toma de conciencia de ser ``elegido´´ sino que debía de ser llevado a cabo por medio del Bautismo, es a partir de este, como uno toma conciencia realmente de su salvación por medio de la gracia. Como decía lo paradójico recaería en que si bien por un lado -en la teoría- mantenían una estructura ciertamente estricta, distinguiendo entre pneumáticos -elegidos-, psicológicos -dotados de libre albedrío, podían salvarse por el merito y el cumplimiento de la ley, en resumen, los miembros de la Iglesia- y somáticos -pasionales, primitivos-. Por otro lado, se hace una fuerte defensa de ese proselitismo abierto. Lo que a mi juicio, podría suponer una contradicción entre teoría y praxis. Pero como he dicho anteriormente, el gnosticismo es un tema muy complejo sobre el cual no me atrevo a zanjar ninguna cuestión.
Espero que con esto haya podido responder de manera adecuada a sus preguntas. De no ser así, estoy disponible para cualquier petición o duda.
Muchas gracias por su interés -a la par que por sus incisas preguntas-,
Un saludo, Ramón
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