CÓD.N04-S01-A-05 ONLINE

El pleito de los 30 años, esculturas implicadas en una guerra social, familiar y eclesiástica

Resumen:

A finales del siglo XVI se produjo en la ciudad de Antequera (Málaga) uno de los pleitos más sonados de la Corona de Castilla en la Época Moderna. La base del conflicto tiene sus orígenes en el privilegio que la Orden de la Predicadores disponía mediante el cual todas las imágenes intituladas del Dulce Nombre tenían que estar depositadas en sus conventos y bajo su jurisdicción, una vieja prerrogativa que hundía sus raíces en la Edad Media. La llegada de la Orden a la ciudad de Antequera y su asentamiento en la misma, supuso un conflicto religioso, social, familiar, nobiliario y político que perpetuó a lo largo de los siglos. Dos familias, los Narváez y los Chacón, dos condados, el Babadilla y el de Mollina, dos órdenes religiosas, los Franciscanos Terceros y los Dominicos y dos cofradías, las de “Arriba” y los de “Abajo” son los protagonistas de una historia escrita con sangre y odio durante más de cuatro centurias. Entre medias la imagen del Dulce Nombre de Jesús Nazareno y otras esculturas que se vieron inmersas en una batalla campal que fracturó a una población entera. Fue tal el conflicto, que ni las intervenciones del la Corona y el propio Vaticano, fueron capaces de aliviar los ánimos y calmar la tensión política y social.

El objetivo de la presente propuesta es doble, por un lado analizar los papeles simbólicos que tuvieron las imágenes que se vieron inmersas en el conflicto, y por otro, analizar y el devenir histórico de estas esculturas, ya que la resolución del pleito conllevó la reubicación de algunas piezas y sus patrimonios, y la realización de otras nuevas que cumplieron papeles fundamentales durante todo el conflicto.

La consulta de los inventarios de entregas de bienes, se nos antojan un documento esencial, para comprender la dimensión social del conflicto, ya que tradicionalmente la historiografía ha considerado que el pleito afecto única y exclusivamente a la imagen del Dulce Nombre, cuando en realidad, hemos podido constatar, gracias  la consulta de los inventarios de bienes y las sentencias del pleito, que la reivindicación afectó al conjunto de propiedades de la hermandad, incluidas además de la esculturas, tierras, joyas, bordados, plata etc.

Palabras clave

Arte Época Moderna escultura iconografía Patrimonio Pleito

Ponencia Online

Documentación de apoyo a la presentación ONLINE de la ponencia

Ver el video en youtube


Firmantes

Los autores de la ponencia

profile avatar

Antonio Rafael Fernández Paradas

Ver Perfil


Preguntas y comentarios al autor/es

Hay 6 comentarios en esta ponencia

    • profile avatar

      Rafael Marfil-Carmona

      Comentó el 12/12/2020 a las 10:35:38

      Querido compañero: enhorabuena por tu trabajo y gracias por tu aportación al nodo de Arte y patrimonio cultural. Eres un pozo de sabiduría. Cuando hagamos, alguna vez, aquella excursión a Málaga que teníamos en mente, haremos parada en Antequera para que nos cuentes esto de viva voz. Has despertado el interés de alguna compañera también de mi área, como Ana Tirado. Un fuerte abrazo y muchas gracias ¡¡

      Responder

    • profile avatar

      Mariano Casas Hernández

      Comentó el 10/12/2020 a las 11:35:08

      Buenos días. Le agradezco especialmente el esfuerzo realizado en su exposición que, por la complejidad y el tiempo tasado, en ocasiones resultaba un tanto confusa. Dado que el conflicto es planteado por unos intereses representados por la alianza entre los dominicos y los condes de Mollina con todas las implicaciones subyacentes, ¿no fue plateado en ningún momento por parte franciscana el cambio de la advocación original del Nazareno para evitar el problema? ¿Existió un interés real en no prolongar el conflicto o cree que a las casas nobiliarias implicadas les interesaba mantenerlo vivo en el común del pueblo para poder servirse de la situación creada según sus intereses particulares? Muchas gracias.

      Responder

      • profile avatar

        Antonio Rafael Fernández Paradas

        Comentó el 10/12/2020 a las 12:09:35

        Buenas tardes Mariano,
        Con respecto a la primera pregunta, por parte de los Franciscanos, y la familia protectora, no hubo ningún interés que cambiar el nombre de la advocación, cuando se inicio el pleito, tampoco se podía solucionar. Se peleó hasta la extenuación para que el Cristo y la advocación se quedarán en el Colegio de Santa María de Jesús. Esta claro que el pleito permitió perpetuar los intereses de las dos familias, también al final se trataba de una cuestión de superioridad y ganar sobre el otro, cuestión que finalmente se decantó sobre los dominicos. Debemos de entender que la rivalidad venía desde 1410 con la conquista de la ciudad, y que se extendió hasta el siglo XXI.
        Un cordial saludo

        Responder

    • profile avatar

      Ana Tirado-de la Chica

      Comentó el 10/12/2020 a las 11:24:38

      Estimado Antonio, felicidades por el trabajo. Es de gran interés. Quisiera preguntarle si la rencillas de este conflicto histórico aún son manifiestas actualmente y si, al respecto, se suceden problemáticas de gestión y difusión de ese Patrimonio. Gracias.

      Responder

      • profile avatar

        Antonio Rafael Fernández Paradas

        Comentó el 10/12/2020 a las 12:03:30

        Estimada Ana,

        Muchas gracias por su visualización. El pleito supuso una batalla campal que se extendió a lo largo de los siglos y que fragmentó a la ciudad. Actualmente sigue habiendo rivalidad entre unos y otros, y socialmente se sigue notando, especialmente entre personas mas mayores, aunque también en redecillas relativas la estación de penitencia y maneras diferentes de entender algunas cuestiones. Por ejemplo no hace tanto que los de Abajo cerraban la puerta cuando pasaban los de arriba. Hace unos años escuche un comentario despectivo de alguien de la cofradía del Dulce Nombre, que decía que en Nazareno de Arriba, llevaba un cirineo, que le ayudaba a cargar con las cruz, porque era maricón y no tenía fuerzas.
        Hay poca difusión del excepcional patrimonio que tienen, la cofradía de Arriba tiene un museo sensacional cerrado. Pero sí que se esta realizando un gran esfuerzo por la conservación del patrimonio, restaurando muchas piezas.
        Un cordial saludo, Antonio f. Paradas.

        Responder


Deja tu comentario

Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.